Quiero compartir con vosotros la primera mochila que he hecho sin coser y en la que …
Quiero compartir con vosotros la primera mochila que he hecho sin coser y en la que he invertido muy poco tiempo. Sí sí, habéis leído bien, y con un material de lo más original.
La verdad es que no me puede gustar más, ha sido muy sencillo y rápido de hacer y lo mejor de todo, sin coger una aguja ^_^
Hace tiempo compré unas bolsas cuadradas en Zara Home para cubrir los maceteros. Estaban hechas de una especie de material entre papel y cartón.
Ya las había visto en las decos nórdicas y me gustaron bastante por su originalidad
(un día, si queréis, tenemos que hablaros de las infinitas posibilidades para decorar los maceteros,
es un vicio…)
Las volví a ver, pero esta vez en una versión redondita y mucho más económica, en la tienda Sostrene and Grene. Al principio no las cogí, porque ya tenía las otras, pero una vez en casa, no paraba de pensar en qué otro uso les podía dar (me rechifla dar usos alternativos a los objetos).
Se me ocurrió convertirlas en unas sencillas pero muy bonitas mochilas.
Las fundas están hechas con un material muy resistente y flexible, ideal para la idea que me rondaba, así que fui a la tienda y me hice con el tamaño más grande y uno de los dos colores que tienen disponibles: el beige.
Os dejo con el material que he utilizado y algunas fotillos del resultado final. Elegí un color muy otoñal para la cuerda de la mochila que va muy bien con el tono grisaceo de la mochila.



Este original diseño de mochila, ideado por Rite Rite nos ha inspirado para nuevos proyectos que esperamos poder enseñaros muy pronto.