Sí, habéis leído bien, Un mundooooooo ideaaaaaaaaaal (ponedle el tonito y voz aguda de Yasmine …
Sí, habéis leído bien, Un mundooooooo ideaaaaaaaaaal (ponedle el tonito y voz aguda de Yasmine en Aladdín, porque si no… no tiene el mismo efecto).
Aisss, ese mundo en el que éramos unas renacuajas felices, protegidas por nuestros papis y sin más preocupaciones que recoger todos los juguetes al terminar de jugar (que si no papá y mamá se enfadaban), no montar mucho pollo cuando no te compraban o no conseguías lo que querías (que si no papá y mamá se enfadaban), no acabar peleándote con tu hermana cuando el juego se os iba de las manos (que si no papá y mamá se enfadaban), no llegar mucho más tarde de la hora que te habían puesto el sábado (no, eso no, ahí ya me he ido de época). Vamos que si seguías ciertas normas que tus padres te imponían (por nuestro bien, por supuesto, que mira ahora que educaditas somos, y agradecidísimas que estamos) y no te ibas mucho por la tangente, lo justito, pues oye, que se estaba más bien «que pa qué» y vivíamos como reinas, para que nos vamos a engañar.
Pero nosotras queríamos ser princesas, y más concretamente LAS PRINCESAS DISNEY. La madre que las trajo a todas. Guapísimas, estupendas, altas, esbeltas, con unos vestidos preciosos de la muerte (menos Cenicienta, pero vamos que le duró poco lo de ir hecha una piltrafilla). Podremos renegar lo que queramos ahora, pero de nuestra generación, a pocas conozco yo, que no les gustara el mundo Disney y sus princesas estupendísimas (más que nada porque no es que hubiera mucho más donde elegir). A mi de hecho, me encantaba Blanca Nieves, por su vestido, que era superalegre, porque los enanos eran unos cachondos y porque se llamaba igual que la patrona de mi pueblo (¡Viva la Virgen de las Ñeves!, este comentario va dedicado a nuestro yayo Francisco, muuuuuuac).
El caso es que desde que hicimos nuestros primeros llaveros Princesas Rite como encargo especial de mi amiga Arantxa (la recordaréis de posts como: ¡¡A la rica galleta de chocolate!!, por su regalo del tarro más dulce del mundo ver aquí), nos han hecho varios pedidos de las princesitas de marras.
Por respeto a las infantas Disney, me voy a guardar lo que pienso del papel que representaron en sus respectivas películas, más que nada porque ellas, las pobres, no tuvieron la culpa y eran unas simples «mandás» (en este caso «dibujás»), y me voy a quedar con el bonito recuerdo que nos dejaron y lo que han calado y ¡siguen calando!, porque mucho Monsters Hihg, pero donde se ponga una Bella Durmiente…
También tuvimos algún que otro encargo de las princesas en chapas, y siempre para «niñas» ya mayorcitas que guardaban un bonito recuerdo de la infancia.
Incluso en alguna ocasión tuvimos que aumentar la familia, primero cuando incorporamos a Alicia en el País de las Maravillas para la boda de mi amiga Inma.
Y después cuando fichamos a Ariel.
(Elena ,Rite menor, aquí te hago la ola porque estuviste sembrada con la adaptación Rite, simplemente me encanta)
Ariel llegó gracias a un encargo precioso de Pilar que quería regalarle a su cuñada (fan requetefan de las pricesísimas Disney) una minicolección de nuestra variante princesas Rite.
Una sería un llavero, otra un broche, un espejo y una chapita.
¿Y a Santo de qué viene todo esto? Os preguntaréis… Pues oye, para que veáis lo bonitas que nos quedaron las muñecas, pero taaaaaaambién para presentaros una edición especial colgantes princesas Rite (en principio para las más pequeñas de la casa, pero oye, nunca se sabe) que tenemos en nuestra nueva
tienda on line.
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¿Qué aún no la habéis visto? Pues ahora tienes la excusa perfecta para echarle un vistazo.
3 Comentarios en “Princesas Rite accesorios”
Mimoli
Ay que monas!!!!!!!!! si no les falta detallito!!!!!!! si es que sois unas cracks! Yo también me ahorraré los comentarios acerca de sus papeles…más de una, y más de dos, hubiera tenido que pasar por mi anterior despacho ;-)pero pobrecillas. Pese a eso, creo que muchas les estamos agradecidas! incentivaron nuestra creatividad (anda que no he dibujado yo gracias a Disney! aunque me centraba más en los animalitos :-))y por lo menos a mi, nuestro sentido crítico acerca de las relaciones de pareja: anda que voy a casarme yo con un mindundi que me despierta y me besa sin conocerme de nada o a buenas horas voy a estar yo lavando y cocinando para 7 enanos explotadores! jajaja (uy! me dejé llevar y comenté…)
Seguir así chicas! que sois lo más!
Rite Rite
A mí lo que más me preocupa que fomentaran el que había que casarse con un príncipe… ¿Para qué? ¿Para ser una mantenida? O_o, uy! que yo también he dicho que no iba a opinar…
Mimoli
jajaja, sip, te iba a contestar, pero mejor no! que llenamos el post de comentarios! y lo que importa es que son monísimas!!!!!!!!!!!!:-)))